
Esas personas deben saber que llevan todas las de perder. Primero las van a jalear, incluso pueden nombrarlos Presidente de la República o Rey de Reyes, no importa, su destino está marcado.

Creo que perdí alegria de vivir cuando me di cuenta de esta condición humana.
D. Niceto intetó que dieramos un paso hacia adelante en democracia e igualdad y acabó exiliado en Argentina.
A Jesús, primero los matamos y luego los elevamos a los altares y no se bien que fue mas perverso si quitarle la vida o hacerlo un ídolo.