La Virgen del Milagro ha entrado a formar parte de nuestra familia sutilmente, se ha hecho presente a través de la tita Mila.
Milagro Oltra nació en Alcoy y sus padres le pusieron ese nombre por la Patrona de Concentaina que es la Virgen del Milagro.
Cuando yo la vi la primera vez recuerdo que me pareció una viejita, completamente sorda, callada, solo sonreia de vez en cuando y me pasó totalmente desapercibida.
Primero yo me fui a vivir a su casa y luego ella se vino a la mia y entre las dos fue creciendo un amor y una complicidad que nos proporcionó mucha felicidad a todos. La tita Mila era tan inteligente que solo tenía lo imprescindible, era libre, alegre, confiada, cariñosa, trabajadora, discreta, prudente, paciente, era como el alma de nuestra casa.
Dejó tanta huella en nosotros que puedo decir que encontrarla fue un verdadero milagro.
Mi nieta lleva su nombre y yo espero y deseo que también desarrolle cualidades tan valiosas como las de ella y que la harán feliz.
Hay personas que se plantean su vida como servicio a la sociedad a la que pertenecen, abandonan su comodidad, olvidan sus intereses y se lanzan a la vida pública.
